La energía solar va en aumento y la innovación y el espíritu empresarial están haciendo posible la instalación de paneles solares en granjas solares remotas.
En 2017, Eugenio García-Calderón emprendió un viaje por España en una bicicleta solar que él mismo construyó. Este ingeniero madrileño, licenciado por la Universidad Politécnica, tenía como objetivo resaltar la importancia de los modelos energéticos sostenibles a lo largo de su aventura de un año, que culminó en un itinerario de 80 días compuesto por 25 etapas diferentes. Esta motivación persiste en él hasta el día de hoy.
Un año después de su travesía, García-Calderón fundó Comunidad Solar junto con otras siete personas. La empresa dio sus primeros pasos instalando paneles solares en casas de campo y luego en comunidades vecinas, acercando gradualmente la energía sostenible al resto de la población, incluso en residencias que no permiten compartir vivienda. La visión de Comunidad Solar es clara: al adquirir paneles solares de uno de sus parques solares, se proporciona a los suscriptores una combinación de energía sostenible. Una pequeña central eléctrica en la ciudad de Palencia, cerca del río Pisuerga, no solo ofrece energía solar, sino también energía hidroeléctrica.
La idea clave es que, ya sea en el techo de una residencia o en una comunidad energética remota, la instalación de paneles solares en el hogar genera energía, evitando la necesidad de adquirirla en el mercado. García-Calderón explica que producir energía de esta manera es mucho más económico, siendo aproximadamente cinco veces más barato que comprarla a un tercero y luego revenderla con un margen de ganancia.
La producción de energía solar experimenta un crecimiento exponencial anual gracias a los esfuerzos para descarbonizar la economía, la reducción de los costos de los módulos solares y el aumento de los precios de la electricidad. España ya cuenta con un parque nacional con una capacidad de generación eléctrica de más de 20.000 MW, y en abril de este año, la producción de energía solar alcanzó los 3.833 GWh, superando incluso la generación nuclear. En conjunto con la energía eólica, que aportó 5.441 GWh, estas dos fuentes de energía fueron las más significativas durante ese mes.